Los dos protagonistas se citan para cenar al caer el sol y se despiden a primera hora de la mañana siguiente cuando amanece.
Esa noche ambos pasan por diferentes estados de ánimo, algunos compartidos y otros secretos, y se entregan a lo que sucede debajo de las sábanas: lo íntimo, lo privado, el deseo, la soledad, el miedo y la ternura.
Todas las noches que fuimos humo es una historia de amor para dos cuerpos y la primera incursión literaria del músico Alejandro Pelayo.
El contacto de seguridad todavía no está disponible. Si necesitan esta información solicítenla mediante este enlace
Este artículo no tiene advertencias de seguridad. Si tienen alguna duda al respecto consulten al contacto de seguridad.