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Sinopsis
Relatos alrededor de la paternidad compuestos por David Otero. «No me olvido del título y del motivo por el que escribo este libro, Precipicio al mar, y es que es un canto y un llamamiento a la libertad de mis hijos.» La inspiración para una canción puede nacer en la orilla del mar, en Marruecos. Y así fue. Tres gaviotas fueron el germen de la idea. Unos padres enseñando a una adolescente a volar libre... por un precipicio. David Otero compone Precipicio al mar. Y la letra de una canción crece hasta convertirse en el libro que tienes en tus manos. Las gaviotas son David, su mujer, Maro, y Luna, su hija. Y a partir de ahí una cascada de recuerdos, de reflexiones, de vivencias sobre la aventura de ser padre. Y la familia sigue creciendo y la experiencia de la paternidad se enriquece con su hijo Gael. Poco a poco se va mezclando la pasión por crear y componer una canción, una letra, con la pasión de construir a base de notas y compases la propia vida. Sus vivencias en los partos, los primeros pasos con sus hijos, la historia de amor con su mujer, la herencia recibida de los padres, los pequeños placeres compartidos con sus hijos... Un vuelo al pasado, al niño que fue, y al presente, al padre que quiere ser. Y, de fondo, y Gael, sus hijos, que no dejan de batir sus alas hacia la conquista de la libertad. «Y vi más allá de una niña que pide un sándwich en una cafetería. Vi cómo se paraba el tiempo, y me topé con una persona que empieza a volar sola, fuera de su nido. Que sigue cerca, pero comienza a andar sin nadie al lado. Por supuesto cuando esto sucede, ya te das cuenta de que la cosa avanza y no hay vuelta atrás. Es una carretera por la que no volverás a pasar hasta que acompañes al siguiente pasajero.»